Kalymnos, uno de los principales destinos mundiales para la escalada y que pocas presentaciones necesita.
Se trata de una pequeña isla griega que parece haber sido creada para el disfrute de los escaladores. Explotado al máximo para el turismo de la escalada, una especie de Disneyland Paris creado para que el escalador se sienta cómodo y solo tenga que pensar en: escalar, comer, beber y disfrutar de sus vacaciones.
Pero bueno, cuando uno va a estos sitios ya sabe que no se está yendo al corazón del Karakorum.
Una vez llegas a la isla y visitas tus primeros sectores, te das cuenta de que realmente se trata del paraíso que te esperabas (o al menos así fue en mi caso).
Sectores con estilos variados a 10 minutos del pueblo de Masouri, aproximaciones cortas, vías de todos los grados con gran predominio del séptimo grado, y todo ello,casi siempre, con unas vistas excepcionales del mar.
Sergi Medina en un bonito 7a del sector de Spartacus, Kalymnos
Una de las muchas puestas de sól que disfrutaremos desde el pueblo de Masouri
Aegialis, posiblemente una de las vías más fotografiadas del mundo
La Grande Grotta y las impresionantes chorreras de Panorama a su izquierda
Asti escalando Priapos en la Grande Grotta
Secret Garden, sector de visita obligada dónde escalar sobre mocos y chorreras
Sergi en Syrtaki Lessons en el Secret Garden
Léa en DNA en la Grande Grotta
Pueblo de Masouri, el epicentro de la escalada en Kalymnos
Léa en la Sirène
Dylan en Daniboy, un buenísimo 8a de chorreras y agujeros
No solo hay chorreras en Kalymnos! Mike disfrutando las plaquitas del sector de Noúfaro
Odyssey, uno de los primeros sectores que se equiparon a principios de los 2000
Playa de Kantouni
Léa en la Sirène, un buen 7c del sector de Odyssey
